Curiosos e inquietos, los niños son vulnerables a sufrir accidentes. Aquí como aminorar los riesgos.
Siempre preparados
Mantén en tu casa un botiquín de primeros auxilios con instrucciones de emergencia. Ubica los números importantes cerca del teléfono, tales como el pediatra, el de tu trabajo y los números de celular de un vecino o pariente cercano.
Asegura ventanas y cierra las puertas
Mantén las escaleras y pasillos limpios y libres de obstáculos que podrían causar que el niño resbale y se caiga. Instala puertas de seguridad para bloquear el acceso a una escalera. Un niño pequeño también puede pasar a través de una ventana abierta. No almacenes ni pongas nada en el suelo sobre lo que él niño podría subirse cerca de una ventana.
Cuidado con objetos pequeños y alimentos riesgosos
La mayoría de los accidentes por asfixia se producen con alimentos, por esta razón es importante cortar las comidas en trozos pequeños. También asegúrate de que monedas, botones, pelotas pequeñas, alfileres o cualquier objeto pequeño estén guardados para evitar asfixias accidentales
Enchufes y cables eléctricos
Cubre los enchufes eléctricos con cubiertas de plástico, mantén a los niños lejos de aparatos eléctricos, no uses un secador de pelo o una radio cerca del agua y enseña a tus hijos a respetar la electricidad tan pronto como sea posible. Los temas eléctricos son también una causa común de incendios en el hogar. Si sientes olor, luces parpadeantes o sobretensiones de energía inusual, llama a un electricista para que inspeccione tu casa y asegúrate de que el sistema de cableado sea seguro.
Productos de limpieza lejos de los niños
Desde el detergente al desodorante, muchos productos del hogar son potencialmente tóxicos para los niños en caso de que los ingieran. Mantén estos productos en sus envases originales, no los guardes en un recipiente donde puedan confundirse con alimentos.
Guarda todos los medicamentos en un armario cerrado con llave. Nunca dejes los cosméticos y artículos de tocador al alcance de los más pequeños. A los niños les gusta imitar lo que ven hacer a sus padres, y productos de uso diario, como perfume, laca, esmalte de uñas, incluso enjuague bucal, pueden ser perjudiciales para los niños.
Nunca solos cerca del agua
Nunca dejes a un niño desatendido cerca del agua, aunque sea por unos pocos segundos. Un accidente puede ocurrir en cuestión de segundos. Quemaduras por agua caliente son también una preocupación potencial. Siempre prueba la temperatura del agua con el codo para asegurarte de que está confortable para tu hijo.