El siniestro más frecuente es el estallido de la olla en el momento de la apertura.
Cocinar con una olla a presión es rápido y sano. Por un lado, se ahorra tiempo y energía al cocinar y además se conservan mejor las vitaminas, pero conviene tener en cuenta ciertas normas de precaución para prevenir accidentes graves.
Normalmente la presión sale por una “chimenea”, que tiene una válvula que emite un sonido avisador. Además, otra válvula de seguridad actúa dejando escapar la presión en el caso de que la primera de las válvulas no funcione adecuadamente durante la cocción.
La emergencia más frecuente que se produce durante la utilización de estos equipos de trabajo es el estallido de la olla en el momento de la apertura, al no haberse producido la evacuación adecuada del vapor que contiene. Esta presión elevada puede deberse a la obstrucción de las válvulas por los alimentos cocinados impidiendo la liberación del vapor.
Para evitar este tipo de accidentes es necesario, además de comprobar el buen estado de la olla a presión, seguir las instrucciones dispuestas en el manual de instrucciones entregado por el fabricante.
– Verifica antes de cada uso que las válvulas no estén obstruidas, realizando siempre una buena limpieza.
– Nunca llenes la olla más de la capacidad indicada.
– Tampoco agregues menos de 2 litros en cada cocción
– Para cocinar alimentos que se expanden durante la cocción (arroz, legumbres, etc) o que produzcan espuma (garbanzos, lentejas, etc), agrega el alimento sólo hasta la mitad del volumen de la olla. Así evitarás que se obstruya la válvula de seguridad.
– No te olvides de la olla, presta atención a la salida de vapor por la válvula giratoria.
– Siempre verifica que la olla se haya cerrado correctamente antes de ponerla al fuego.
– Una vez que empezó a liberar vapor por la válvula, no olvides bajar el calor a una temperatura media.
– Nunca abras la olla hasta que no ha expulsado todo el vapor. Hay que esperar a que baje la válvula.
– No usar la olla si notamos que hay escapes por las juntas o la tapa no cierra herméticamente. Podría quedarse sin líquido en el interior y quemar su contenido.
– Algunos fabricantes recomiendan cambiar las gomas de las juntas cada 1 o 2 años, según su uso.
– No dejar sin vigilancia la olla mientras esté funcionando y el fuego esté encendido.
Siempre cumple con estos consejos para evitar accidentes como quemaduras o golpes. Disfruta cocinando comida sana y deliciosa para toda tu familia, sin riesgos.