Apoyo con familiares o amigos, tranquilidad en las decisiones y comenzar a retomar las actividades normales son algunas de las recomendaciones.
Expertos en psiquiatría recomiendan liberar la tensión apoyándose con familiares y amigos con el fin de bajar la ansiedad y comenzar a retomar las actividades cotidianas. También recomiendan mantener contacto con vecinos para así sentirse más acompañados, comprendidos y con redes de apoyo.
Mantente informado de los acontecimientos para que tengas claridad acerca de la dimensión real de lo que está ocurriendo, de los hechos que te pueden afectar , de la ayuda que te brindan distintas organizaciones, de las zonas de riesgo y zonas seguras, de lo que ocurre en los colegios o trabajos, del transporte, entre otros.
Si estabas en una zona segura, lo mejor es no moverse ya que en estas situaciones se generan caos y atochamientos. Concéntrate en evaluar daños de la propiedad o el entorno donde estas alojando, en conseguir víveres, en brindar protección a los tuyos, en los riesgos de movilizarse. Lo importante es actuar de manera tranquila y organizada.
Si tienes niños chicos, háblales con la sinceridad de lo que pasó y asó los ayudarás a entender y a bajar sus niveles de angustia. Explícales que habrá más temblores hasta que la tierra se acomode…
Si tienes alguna habilidad o conocimiento ponlo en práctica de manera solidaria. Estarás ayudando a las personas y también harás un gran trabajo contigo mismo, colaborando para que todo vuelva a la normalidad. Si puedes continúa con las rutinas previas al evento, tales como trabajar o compartir con familiares. La sana distracción aminora los pensamientos negativos y las sensaciones de frustración post traumático.
Todas estas recomendaciones pueden parecer mínimas pero pueden ser un apoyo en estos casos en que la naturaleza nos recuerda lo fuerte que es.